Sería capaz de contar miles de historias pero es su nombre el que se cruza en su memoria. Y quizás hubiese olvidado su rostro de no ser por que lo ve cada madrugada, tan frío como la pared, tan alejado. A veces recuerda su voz, a pleno pulmón, poniéndose a cien. Sabe que es su medicina como es su maldito veneno. Poco más y hubiese muerto. Exhalado su ultimo aliento en un sueño no real.
Menospreciada, al instante. Por que no es nadie, no es nada. Es un algo más, algo incapaz de poder merecer un mérito por sus actos, sus palabras, Porque es vieja, conocida y lo mismo de siempre. Acabó la obra de su escenario y nadie la recuerda. No con cariño, no con flores. Pero ahí estas tú, y es que es tarde. Pide perdón, de verás que lo hace.
Por ser como es, por no olvidarte (poco a poco), por no poder hacer canciones ni reconocer que ese besó la gustó.
"Dejarme de noches calladas como putas por encerrarme en un mundo paralelo, tan fantástico. Hacerlo real, ganármelo a base de sufrimiento ajeno y dolores placenteros. ¿Qué estoy diciendo? No soy así, no voy a serlo, creo que no quiero verme reflejada en ello… pero es que últimamente ando medio llorando. Y es que el viene a hablarme de ti, me golpea la cara con la intención de curar mi enfermedad ¡qué no estoy enferma! Le replico. Estoy cuerda en un mundo de transparentes, almas ensimismadas en un futuro negro sin ningún sueño. Sácame de aquí ¿Qué me pasa? Hablo sin sentido con alguna intención, quizás busco distracción, a lo mejor quiero más de lo que puedo tener, ¡no lo sé! Me estoy volviendo loca, siento el ardor en mi garganta, un torrente de agua salada está al caer…"