Respirar profundo no es malo, respirar acelerado tampoco. La incertidumbre es la nada que siempre esta ahí, acechando sobre nuestro futuro. Lo que deberíamos sentir es nuestro corazón latir. La ansiedad, el miedo, los remordimientos no son más que sentimientos que emanan de nuestro corazón. Debe ser que no lo escuchamos tanto por miedo al qué dirán. Quiero saber en qué momento quedó en un segundo plano.
Cansada del materialismo, del yo tengo, tu tienes. Yo tengo temor a dónde estaré mañana. Miedo a no saber si será mañana el olor de sus sábanas. Tengo sueños, esperanzas. Pero soy muy joven para tener tantas plegarias.
Espero no tomar la decisión equivocada porque prefiero vivir enamorada que en una casa adinerada. Sonará tópico, estúpido, de cuento. Pero espero no estar equivocada.
En ocasiones hace falta irse a la cama con tantas lágrimas que ni siquiera sabías que había tantas ahí, acumuladas.
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