jueves
¡Ya me escondo en mi caracola de cristal! y sigo con el miedo de que venga una ola y la rompa, que son muy bestias y yo muy tonta. Tengo mis detalles de orgullo y otros en los que la gente me suele despreciar. Lo entiendo, yo también me odio, me busco y no me encuentro. Egoísmo ¡Sí! Hace un año en que nació esa palabra en mi pecho. Rabia, ira, odio... ¡Egoísmo! Y lo soy, quiero serlo, que mira, que soy egoísta con ellos y conmigo que quiero quitarme los ojos para que no pueda ver lo que veo, solo para mí. (Es de locos) Bolígrafo y papel, seguiré soltando alguna carta en la arena en busca de algún desconocido, lo suelo hacer. Y si no, que me las roben las gaviotas, ellas sabrán dónde suele llover. Malditas olas, volverán a enamorarme mientras me escondo en mi caracola para inventarme una voz que me pueda tranquilizar. Me quedó con un agridulce sabor de boca que se llevará el mar a su costa. No me importa, no lo necesito. Solo devuélveme quién soy. La última vez que nos vimos dejaste claro que no tenía procedencia, ni rumbo, ni destino. Buscaré entonces dos o tres caminos y me quedaré quieta, esperando a que pase, a que vuelva otra vez. Que se quedó en alguna parte y la pienso recoger. Abriré tus entrañas para arreglarlo. El tic-tac dicta pero se escapó.
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No se nada de ti...te echo de menos...
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