jueves
Sinceramente es muy duro negarlo. Uno puede permanecer estable, puede acostumbrarse a los pequeños detalles y hacer de ellos un hábito. Pero el cerebro, el corazón, llámalo X, lo bautiza de antinatural, y lucha, lucha contra ello. Por eso no logro descansar, por eso trato de olvidarme de ti. Y me da por pensar que te hizo cambiar, y pienso que te hice cambiar.
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