Pages - Menu

Popular Posts

lunes

what is it?

     De vez en cuando me tumbo en la cama y todo empieza a dar vueltas. Pero no es mareo, son sensaciones, recuerdos. No es tristeza pero tampoco alegría ¿Quizás incertidumbre? Me gusta tener el control de todo aquello que me afecta. Por ello no soy capaz de entender que se escapa de mi alcance. No es esta lluvia que parece que no se va a ir. Tampoco el ruido que escucho tras mi ventana. Ni el dolor de que no estés cuando quizás más lo necesite ¿Me estoy volviendo dependiente? ¿O acaso es esto miedo? Siempre me he considerado una persona segura de sus emociones, también fiel a sus pensamientos. No sabes la rabia que siento cuando creo que esos cimientos se tambalean. Solo ocurrió una vez: y qué dolor. Qué sensación de mirarte en el espejo y no saber dónde estas, ni quién eres. Qué eres todo aquello que prometiste nunca ser ¿Me estoy rindiendo? No. Es solo miedo. Porque esto no lo puedo controlar. O quizás es una revolución de hormonas que esta preparando la guerra en mi corazón. Seguramente mañana despierte y otra vez todo este bien. Pero en el fondo sé que seguirá ahí. Puede parecer ridículo pero para mí fue suficiente ¿Y yo? ¿Soy suficiente?


Para hacer que se plantee el universo. Que quiera dejarlo todo e irse. E irme. Que me quiero ir. Pero a la vez no lo sé ¿Y si no soy suficiente? ¿Y si duele? ¿Y si no estoy? ¿Y si no estás? Son dudas. Muchas ¿por qué? Nunca estaban ahí. Ha sido y será algo que siempre he tenido claro ¿qué es lo que ha despertado? Se esta tambaleando. Antes no estaban estos muros, ahora los veo claros. Y con esto quiero que entendáis que siempre habrá gente que se interponga en tu camino. Que te diga que no puedes, que te ponga obstáculos. Que te haga sentir que no eres suficiente. Pero recuerda: Tu eres tu peor enemigo. Lucha, que no hay tiempo para el espectáculo.

martes

Ghost of you

 No fue el querer, ni mucho menos.


Fue que después no te importara.


Como si nada pasara.


Como si nunca hubiese estado ahí 


Como si me olvidaras.

domingo

Decías

 «Tenemos que construir un futuro juntos», decías,

mientras colocabas a mi alrededor

un precioso cerco de ladrillos.

Esa no era mi idea de construcción.


viernes

 Es imposible creer que no volvería a escribir desde el dolor. IMPOSIBLE. Pero si creí cierto que podría empezar a hacerlo más desde otros sentimientos. Conozco muy bien mis lágrimas, las echaba de menos. Y estas sin duda son de frustración. Creo que voy a empezar a rendirme en ciertos aspectos. O quizás en personas ¿debería rendirme? ¿De mí misma? No entiendo cómo es posible que empatice hasta tal punto de entender todos los puntos de vista y los porqué. Siempre entiendo que hay varios puntos de vista. La gente se acostumbra. Siempre estoy ahí. Y no sé cómo lo hago que poco a poco me hago invisible. Ya no queda nada de mí. Hasta que no esté ¿por qué la gente es así? ¿por qué se acostumbran a lo bueno y luego se confunden cuando te decides ir?


jueves

Shame on you

Recuerdo estar subiendo a ese autobús y tus palabras tan claras: eres un libro abierto, ese es el problema. Por una vez en mi vida me planté y dije NO. Ese no es el problema, el problema es que vivís demasiado asustados a la verdad. A ti que te gustaba causar buena impresión, yo no era más que la rebelde que hacía Troya arder. Y eso te repateaba, a tu madre le encantaba. 

Ese día aprendí una gran lección y tu perdiste a quién te haría volar, pero entre tu y yo, no valías la pena. Ni tú ni tus perdones. Porque en esta vida debemos rodearnos de gente que nos haga crecer y tu no soportabas verme volar.


Ahora mis alas están heridas, se les ha olvidado esa sensación. A veces siento que todo eso puede cambiar ¿Sabes? me he visto correr llena de ilusión por ver amanecer, he despertado bailando. En ocasiones me apetece llorar. Es lo bonito de ser humano. Me conozco, me han forzado a valorar. Aunque todo tiene su arma de doble filo. Y es que ahora con quien me acuesto no sé si lo amo o no lo soporto. Es una lucha constante de que quizás si pero serás mi siguiente decepción porque... mírate ¿cuál es tu aportación a todo este desastre? Caos, dolor. En ocasiones valor ¿no te cansas?

Ese fue el precipicio

 Fue un suspiro. Todo comenzó así. Se me heló la mirada frente a unas palabras que no llegué a comprender, pero sí. ¿sabes ese momento entre la cabeza y el corazón? La cabeza lo entendió, el corazón se rompió. Suspira.  Here we go. ¿Recuerdas la última vez? ahora lo haces a solas, no por valentía, no es cobardía. Es vergüenza. Llevan diciéndote años que no valen de nada, que otra vez ya estás. Algo que era natural se convirtió en frustración. Eso te cambió. Hasta el punto en el que estás ahora. O estabas. No lo sé. Es todo tan confuso. A veces sí, a veces no. El caso es que quiero que aprendas una cosa. Eso que haces, eso que sueles hacer cuando te rompes: Hazlo a solas, que nadie lo vea. No porque sea una vergüenza como tu te piensas. Es que eres débil. Y no tienes nada que demostrarle al mundo más que a ti. A ti te pido que te hagas un favor. Respira y recapacita. No sabes si vale la pena siquiera. Sabes que sí, pero no. Sabes qué quieres, pero no. Y así todo. Si pero no ¿Cómo no vas a estar confundida?


Me declaro en guerra y tu eres el enemigo, tu y tu absurda hipocresía. Nadie hubiese apostado por ti y aquí estas hundiendo todos los barcos, lanzandote al precipicio. Lo tratamos, lo hablamos, este no era el pacto. Estás hasta arriba de ron, pirata de lo insensato, otra vez lo hiciste volar. Y ahora dime ¿Qué hacemos con el barco? Porque ya zarpo sin un rumbo más que el que dictó tu corazón.


Quiero desprenderme de ti, quiero volar. Con todas las heridas que eso conlleva y si hace falta las lameré. Porque mi rumbo nace de lo insensato, de lo que se sale de la normalidad. Eso hace tiempo que perdió su significado. Llevas tiempo atando a este demonio que no hace más que llorar.  Te aferraste a los atardeceres pero siento decirte que no fue la luz, era el sol. Yo ya zarpé de la orilla, lo siento, pero te dejo en libertad. 

viernes

Contra los muros

 Los caminos pueden ser muy distintos, todo depende de la dirección que quieras tomar. Quizás mi pasado hubiese seguido ese camino oscuro, lleno de maleza que seguramente terminaba en una lección ¿Quién cogería el camino lleno de color? ¿Acaso no sabe todo el mundo que se trata de una trampa? Pues en mi caso, decidí retomar la esperanza y pensar que algo bueno depararía. Me reí, me divertí y aunque estaba lleno de golpes, confié. Tanto que me asusté. No sé si alguna vez habéis tenido esa sensación de que todo fluye. La música, la conversación. Incluso diría que sabes bailar. En ese momento todo vale. Todo es posible, nada parece sacarte de ese circulo de vicio. Porque en ningún momento te has parado a pensar, estúpida, solo te has dejado llevar.

En ese momento, todos tus miedos y tus inseguridades renacieron. Ya no sabías bailar, ya no podías confiar. De repente estas cayendo al vacío de ese acantilado que parecía divertido. Pero se te olvidó comprobar la profundidad. Te das cuenta de que quizás, aunque todo sea natural, no te puedes dejar llevar. Y una vez más, lo has vuelto a hacer. Depositaste toda tu responsabilidad afectiva en algo que no es real. Pero se siente tan real... Y quizás podría funcionar. Es imposible que pueda funcionar. Porque como puedes comprobar, has sanado, si. El problema es que quizás el mundo no está preparado para tu nuevo yo. Para tanta intensidad. En un momento ya estas rota y todas esas inseguridades que se desvanecieron, volvieron. Volvió la coraza. Y el miedo. Volvió la duda. En este momento quiero salir corriendo.

jueves

Eras indestructible

 Con el tiempo encuentras La Paz contigo mismo. Algunos cuestionaran tus capacidades de asumir ciertas derrotas o incluso alguna victoria. Lo que no saben es que tu llevas Años preparado para este momento. Para armarte de valor y decir “aquí me quedo”. Conocerse a uno mismo no es un regalo, es un trabajo que vas labrando a lo largo de los años. Pero siempre hay momentos en los que los cimientos se desmoronan. Como el día que me di cuenta que mis principios se vieron reducidos en cenizas. Que podría haber sido capaz de todo y en cambio no recibí nada. Que poco a poco he ido perdiendo la capacidad de recordar. Y ya no lo recuerdo, prácticamente nada. Solo un atardecer. Desde entonces me da miedo encontrarme con el sol de cara. Por si lo vuelvo a ver. Como quien ve renacer a un fénix con las alas rotas. Algún día saldrá a flote pero hasta entonces no Sabrá volar. Puede intentarlo, por su puesto. Y serán esos momentos que le darán paz.

No encuentro la llave que abría este camino. Quizás La Haya tirado a la basura. No sería la primera vez. Pero he encontrado una a una puerta diminuta que casi no puedo ver ¿lo sientes? Son tus emociones que vuelven a nacer. El peso recae sobre un cuerpo que no puedes ver. Y se tambalea. Te caes. Y todo vuelve a suceder. Si te quedas, ven, que te lo cuento todo. Y si quieres vemos amanecer.



martes

Babe, what the hell happened?

 La mayor ficción fue pensar que todo volvería a ser como antes. Que cuando se entrelazan dos cuerpos aflora de nuevo todo aquello por lo que un día algunos murieron. De Repente entiendes que hay olores más allá de la nostalgia. Olores con aire fresco, tactos que suavizan la piel. Jamás pensé que diría esto, siempre pensé que ser arisca era parte del plan. Quizás no era más que una estúpida coraza que me quise creer. Ya que en este momento, en este lugar, todo es delicado. Y cuando menos me lo espero, me siento un gato acurrucado sobre la hierba, escondido, refugiado, junto al calor del sol. Siempre pensé que sería la luna y no entendería de fricción. Pero aquí estoy. Saboreando eternos recuerdos que jamás creó.  Tampoco sé si ocurrirán. Solo sé que algo implosionó. Así que pienso continuar respirando el aire que un día me ahogó para entender que el problema no surgió de mí. Quizás tampoco de ti. Supongo sería una mezcla de conformismo donde idealicé verdades que no existían sobre ti. Por lo que voy a arriesgar pensando que el error fue que no habría mucho más por lo que luchar. Y si lo había ¿No me ves?  Estoy más viva que nunca