Maybe I hate you. I don't care what you think about me, really, I don't think that I love you even a little bit. It must be your perfection, the way everybody looks at you and talk about how good are you. You are good at sports, handsome, tall, good talking in English and perhabs in another languajes. You look so good with that beatifull smile, everybody loves you and you have the gift to make everybody happy. No one can say that no one is proud of you. You always are so sure of yourself, you ever move from the things you don't like or maybe you don't know. How can you push away all the things you don't like? Well... you can see. I Hate you, hate the way you are, how you see better than me and how you know it. Because you laugh about me and the way I am. I'm tinny, so dull, ugly, with that stupid habit of stay at home and always study. I'm boring and you know it. And I hate you as much as you make me feel sick. I would like to beat you, sometimes I want to kiss you, bite your mouth and then kick your ass. Because you are so disgusting... but I feel so good when there are a "you and me". I just hate your perfection, how easy is all for you and for me, is all a shit.

And now... Here we are. I was waiting for so long, I only have hope that one day we will meet again. I can hear your laugh when I talk to You, I just hear amazing words coming out of Your mouth and I only think... Why? I Mean, all this months I feel like a scumb and the both of You only make me feel worts. I Really diserve this? I only wanna feel important for someone... No wanna be a baby doll

No existe un número determinado de rarezas que describan este ser, pero sería un placer para mí describir unas cuantas. Las mejores rarezas sobre mí, me gusta desayunar para cenar, cereales con leche si puede ser, cenar para desayunar, trastorno alimenticio incomprendido, tengo como vicio fumar en azoteas mientras pierdo mi sentido, escribir para luego quemar los cuadernos escritos, suelo mirarme durante minutos en espejos buscando la fatalidad, baños de más de cuarenta y cinco minutos acompañados de un buen whisky con hielo, Jack Daniel's, que se note el número trece. Adoro ese número, simplemente lo adoro y ya especifique las causas. Tengo como hábito enrollar deseos y própositos en papel guardándolos atados con hilos de colores en una caja de cristal que me regaló mi primer novio. Me tomo dos cafés al día, que rareza (ironía), pero sin ellos no soy persona. Escribo, escribo como seguramente hará cualquier indivíduo en algún momento de su vida. Sueño y nunca lo digo, pienso y aún así lo resisto. Hablo con los animales, les sonrío cada mañana, hay un mirlo medio blanco que siempre me devuelve el saludo cuando voy al gimnasio o vuelvo del instituto, ya somos íntimos amigos. Suelo sentarme en la acera a ver el tiempo pasar, sola o acompañada, me da igual, fumo paquetes a la semana cuando practico este hobby. Analizo a las personas, sin obtener nada a cambio, no juzgo, solo espero. Escucho los latidos, no sé por qué. Y me enamoro, me enamoro tanto de la gente que me es indiferente sabiendo que acabaré defraudada.

Casi derramo el whisky mientras me bañaba. Me desperté de un recuerdo y quizás eso sea lo malo. Pueden a llegar ser incluso peores que las pesadillas siendo más dolorosos. Pero estamos hablando de buenos recuedos... Recuerdos que quedaron grabados con sonrísas que metamorfosearon en lágrimas. Me desperté como si hubieses llegado en persona a clavar una estaca en mi corazón, tomando un profundo respiro, inhalando cualquier cosa que no fuera aire, confusa acerca de mi situación. Una mezcla de recuerdos explosivos en los que se intercalan rostros, está él, está el otro, esta un cógeme de la mano y nuestros rostros encontrándose a oscuras bajo la cama segudidos de un lo siento pronunciado por mis labios. Encontré el quiero abrazarte y el esta vez pago yo. Estaba el creo que te estoy cogiendo cariño y el te gusto. Tan contradictorio, tan doloroso sabiendo que provienen de la mente de dos personas diferentes y que ninguno te guardo en cualquiera de estos corazones.

Ultimamente no tengo ganas de vivir. Sé que es ridículo, a esta edad, en estos momentos, con tales circustancias... Pero es constantemente una cosa tras otra, llegar a casa y únicamente escuchar que no sirves para nada, que no estudias, pierdes el tiempo dios sabe en que, quizás tirada en la cama, a pesar de pasar horas y noches alli sentada entre apuntes y notas. Aún alejándome de todo aquello que tanto amaba... Dejando de ser aquello que solía ser. Para nada. Y me queda la droga que compartimos de vez en cuando, me quedan las conversaciones sobre sexo y tu ego, con el que me prohibes hasta sonreír. Y dime, ¿Qué felicidad es esa?

Por ti

No sabes como escuecen estos meses, caminando de puntillas para no romperlo más. Te podría decir que durmieses conmigo esta noche, pero luego vendría la excusa y su hermano gemelo el reproche. Te podría decir como dueles, pero te confieso que ya estaba esperando que algo me sacara la piel de los huesos. Te podría decir que mañana veremos el modo, pero nunca te quedas conmigo... Ni tampoco te marchas del todo. Te podría decir que lo hice todo para ver si conseguía cortar las cuerdas del pasado, porque vi que a ti el amor solo te gusta con heridas y tu nombre no cabía dentro de mi porvenir.

Te podría decir que aún estoy arreglando los rotos, porque aún no he encontrado un buen sitio por el que hacer pedazos las fotos. Te podría decir que también intenté comprenderte y aprendí que tu forma de odiarme eran solo las ganas de verme. Te podría decir que mañana veremos el modo de aprender a quedarme contigo o aprender a marcharme del todo. Si hubiese vuelto, pronto te arrepentirías; si hubieses vuelto, yo me habría querido ir porque volver dónde tan solo hubo heridas... El pasado es una chica a la que no hay que desvestir.

¿Sabes por qué? porque en el fondo la que va a salir perdiendo soy yo. Cuando esto acabe (porque va a acabar) tú vas a seguir entero, porque no te importo tanto, no me quieres tanto. Sin embargo yo voy a romperme en mil pedazos. Voy a llorar, voy a echarte de menos, voy a morirme de celos cuando otra te haga feliz, voy a desgarrarme con tus canciones favoritas. Voy a romperme. Y tú ni siquiera pensarás en mi cuando suene en tu cuarto la voz de Brandon Boyd. Voy a salir perdiendo. Y tú vas a ganar otro capítulo para la historia de tu vida. Sólo otro capítulo, otra anécdota. Sólo eso. Soy un capítulo, quizás una línea... la más fina, la más débil.

Las cosas pierden el sentido. Encuentro palabras donde siempre encontraba odio, nace la confusión, el porque y para qué. Que uno ya se cansa de tanta tontería, buscas el momento más inoportuno sólo para echarme algo en cara, por el simple y mero hecho de que adoras pelear, amas decirle a los demás que deberían hacer, aún cuando no tienes razón. Quieres que el mundo siga el ritmo de tus pies pero como creo que esta quedando escrito... Yo no me subo a este tren y menos contigo. Porque desde el principio has estado pisándome con esa manera tan enferma de pensar sólo en ti. Si quieres viajar. Acaso me has preguntado si te quiero en esos momentos a los que tu llamas importantes? NO. No quiero. No más. Esta noche, es mi noche y pondré el tequila encima de la mesa rodeada de los que decidieron quedarse una vida entera junto a mi, que me quieren ver crecer, quieren verme feliz. Ya no se ni lo que quieres tu, que empiezo a dudar. Vete y dejame en paz.

Hay tantas fichas sobre la mesa que ya no deja de confundirme. Porque estas me dejan ganar pero al rato, las otras me rompen los esquemas. Dar un paso que creías adecuado y ahora es el que ha creado tus errores. Trato de buscar un equilibrio entre la objetividad y lo subjetivo, intento encontrar el momento adecuado para abrazarte, sobretodo cuando lo necesito por encima de cualquiero cosa pero vivo con el miedo de saber que acabarás negándomelo, busco las ganas de que quieras que te mate lentamente a cosquis, espero el momento en que hablemos, y hablemos y hablemos sin casarnos de lo que contemos, da igual el contexto ¡hablemos! Mantengamos algún tipo de contacto que poco a poco nos una la piel, no tan brusco, no tan directo. Quiero escucharte y que me escuches, quiero que de vez en cuando tengas el detalle de besarme sin que haga o provoque la intención. Porque debido a tu ¡déjame en paz! y darme la espalda en la cama y a tu "dame cariñitos" me mantengo confusa, asqueada por tu bipolaridad. Entonces pienso, qué asco doy ¿no? Al fin y al cabo, tengo esos detalles, tengo los malditos e incansables detalles de hacer las cosas mal. Ahora es no saber actuar, que si pasas, yo paso, si me hablas, te hablo, si me besas, nos besamos, si dormimos arropados, lo hacemos juntos aún sin estar cansados. No hay cosa qué más me gustaría ahora que quitarte tus miedos de un plumazo, hacerte entender que no se basa en saber, se trata de aprender, de abrir poco a poco las ganas de conocer. A pesar de no saber, de querer, no poder, buscar, aprender, perder y querer marcarlo en tu piel, quiero luchar y saber que algún día, quizás, te muestre, y te guste, eso que no dejo ver.

No concordaban mucho. De hecho, casi nunca concordaban. Siempre se peleaban. Y se retaban uno al otro cada día. Pero a pesar de sus diferencias, tenían algo importante en común. Estaban locos el uno por el otro, o eso pensaba ella. Aún queriendo mandarte a la mierda, es verdad, no sé vivir sin tí.

¿Y qué si lo único que te hace feliz también te quita la felicidad? Contradictorio, pero cierto. ¿Qué haces cuando descubres la verdad? Esperé y esperé... hasta que contigo me topé. Mantuve mis sueños vivos mientras tu hacías lo que te entraba en gana. Que si esto me molesta, lo otro me da rabia, que no hagas eso ni me toques cuando me acuesto. Porque todo es por tu culpa. Por supuesto. Sé que no soy capaz de hacerte frente, que por mucho que me enfade acabaré dejándote que hagas conmigo lo que te da la gana. Por lo menos me ha quedado claro que tus inquietudes, que sorprendentemente tienes, borran mis inquietudes, aunque yo no tenga nada que ver en ellas. Como un científico, un experimento.

Y que más da que pasara la noche en vela, observándote, como me ignorabas, como me dabas la espalda mientras dormías en mi cama...

http://www.youtube.com/watch?v=6w-RHf9OXj8

-How could you?! You had me...

-I lost you at the minute I left town. I don't care about what you think about me anymore

http://www.youtube.com/watch?v=jxZIZJjnvl8

Or creazy or not, that kind of love never dies.

Debí haberle echado el lazo al caballo cuando tuve oportunidad. Ahora, actualmente, se me ha escapado y con él, mi libertad. Pero me gusta que esté con él, lejos, distante, pero a la vez tan cerca. Que cuando me necesite venga a mi buscando cierto cariño entre mi regazo. Es esa clase de personas que posiblemente si me pongo a contar, me haga menos de reír, que de llorar. Aunque esos momentos en los que la rabia se apodere de mi cuerpo y quiera empujarle lejos, serán los que me llenen cuando no esté, solo recordando la de veces en que la cagué, en la que jugábamos a un tira y afloja en el que el final dependía de su decisión. Ahora sí, luego no. Tan bipolar como siempre. Hoy somos, mañana no te conozco. En ocasiones me entristece creer que no soy nada para él pero me lo recompensas con algún momento tierno acompañado de un buen recuerdo. Pero odio esa manera que tiene de hacerme la persona más feliz de este ecosistema y arrebátarme cualquier sentimiento con un gesto. Ya sea dándome la espalda, con unas palabras mal dichas o bordes, sin un abrazo ni un hasta luego. Esos detalles que te marcan muy dentro. Odio la manera en la que me hace sentir la mayor escoria de este mundo, culpándome de cualquier situación embarazosa o desagradable para su ser, también odio esa manía de decir frases por lo bajo como si creyera que no le escucho, me atraviesan como si de balas se trataran. Pero tampoco tengo palabras en mi defensas y menos ante un "no eres nada sin mi". No sé lo que soy, no sé a que se debe esta debilidad, no sé de dónde saco las fuerzas cuando se trata de mantenerte a mi lado. No eres un príncipe azul que mima a su princesa, eres un mustang, un maldito mustang que trata de dominar a otro. Hay algo que está mal... Pero aún así no cambiaría las cosas, quizás ese sea el problema, que ya es tarde para reconstruír la base y tampoco me iba a esforzar. Hay algo que me encanta en esta trama de mi vida y aunque me duela, a veces me haga querer llorar, no lo cambiaría por nada.

No tengo palabras. Simplemente, aunque sigamos con nuestro odio, las ganas de luchar el uno contra el otro, siguen naciendo en mí los celos y una sonrísa tonta. Gracias por volver a mi vida.

Y ahora, tras ahogar mi sangre en alcohol y penas, de llenar mis pulmones con olor a hierba, es entonces cuando la habitación me da vueltas y me pregunto ¿por que? Era la base lo que estaba mal

I FUCKED UP

Hace poco me dejaron escrito en un papel con una foto "tu bondad es tu mayor defecto". No comprendí esas palabras, no entendí como algo tan maravilloso podía degenerar en algo malo, es como si me dicen que una mariposa será el enemigo del aire, no sé, algo contradictorio. Ahora lo comprendo. Mi "bondad" ha llegado hasta el extremo de agachar la cabeza y esconder el rabo como los perros, literalmente. Será que consentí demasiados daños desde un principio, que no hice nada para remediarlos, dejé que las palabras me atravesaran defendiéndome unicamente con una mala cara. Y a cambio recibía un enfado, a lo mejor de tres segundos pero se iba acumulando. Aún asi, sigo sintiendo que es culpa mía, aunque en el muy fondo sepa que no es así, que quizás mis palabras tuvieron derecho a ser juzgadas con la sanción de alguna mala mirada. Pero nunca imaginé que la sentencia sería echarme a patadas de tu vida, como si nunca te importara. Maybe I should stop trying do the right things...

It hurts... It hurts as much. It was supposed that you don't care about me and I never  mind you. But now i feel like I was been screaming all the time and no one can hear me. Why? I mean... Why I feel like this. I don't love you, don't love me, so... Why I feel like a lot of knifes are hurting my? Break me down... Because I fucked up one more time.

Reconozco mis errores, sé que más de una vez soy malvada, que no valoro a las personas lo suficiente o que no sé tomar las oprtunidades cuando se me presentan en bandeja. Ya sabes, nadie es perfecto. Se supone que también aprendo de ellos, que no vuelvo a caer en bucles viciosos de los que es prácticamente imposible salir. Se supone. Aquí estamos otra vez, en la misma mierda. En la puta mierda de que sois todos iguales. Mis palabras se ven alteradas por algún motivo, quizás estoy sacando conclusiones anticipadas, puede ser que me este equivocando pero como de costumbre, haga lo que haga, diga lo que diga, soy la idiota parada. ¿Sabes? Te dedicas a reírte de él, de burlarte y créerte mucho mejor. En cambio, no eres consciente de que no vuestras diferencias no son tan grantes... Tu y él tenéis mucho más en común que un simple hobby.

Every atom in your body came from a Star that exploted. And, the atoms in your left hand probably came from a different star than the atoms in your right hand. It really is the most poetic thing I know about the universe: You are stardust. You couldn't be here if Stars hadn't exploted, because the elements (The carbon, nitrogen, oxygen, all the things that matter for evolution) weren't created at the begining of time, they were created in Stars. So forget Jesus. Stars died so you could live.