Escuché la canción perfecta de mi, para ti. Soy reacia a hacer esto, por lo menos contigo pero estoy entendiendo... Que por mucho que lo intente, no te conozco y posiblemente no te conoceré. Pero conozco como me siento a tu lado. La primera vez que vi tu rostro pensé que el sol atardeció en tus ojos y la luna y las estrellas fueron los regalos que tu diste a la oscuridad. La primera vez que besé tu boca sentí la tierra temblando en mi mano al igual que el temblor del corazón de un pájaro cautivo. La primera vez que dormí contigo sentí tan cerca tu corazón del mio que sabía que nuestra alegría llenaría la tierra y duraría hasta el fin de los tiempos. La primera vez que vi tu rostro, no imaginé que te convertirías en todo para mí. Cada vez que veo tu rostro, me da un vuelco el corazón. Todavía. Todavía me arreglo para cinco minutos, para que me llames bonita. Aún tiemblo cuando me rozas, como si fuera la primera vez. Y sigo aguantándome las lágrimas cuando te veo dormir a mi lado.
domingo
I'm Happy
Escuché la canción perfecta de mi, para ti. Soy reacia a hacer esto, por lo menos contigo pero estoy entendiendo... Que por mucho que lo intente, no te conozco y posiblemente no te conoceré. Pero conozco como me siento a tu lado. La primera vez que vi tu rostro pensé que el sol atardeció en tus ojos y la luna y las estrellas fueron los regalos que tu diste a la oscuridad. La primera vez que besé tu boca sentí la tierra temblando en mi mano al igual que el temblor del corazón de un pájaro cautivo. La primera vez que dormí contigo sentí tan cerca tu corazón del mio que sabía que nuestra alegría llenaría la tierra y duraría hasta el fin de los tiempos. La primera vez que vi tu rostro, no imaginé que te convertirías en todo para mí. Cada vez que veo tu rostro, me da un vuelco el corazón. Todavía. Todavía me arreglo para cinco minutos, para que me llames bonita. Aún tiemblo cuando me rozas, como si fuera la primera vez. Y sigo aguantándome las lágrimas cuando te veo dormir a mi lado.
Benditos los momentos que saben a felicidad. Por fin rodeé tu cuello, te echaba tanto de menos. Mis piernas abrazaban tus caderas tratando de quitarte la respiración. Y tu sonrisa... Me demuestras que la distancia nunca fue un problema para nuestra amistad. Mira que estaba deseando verte para... volver a hablar con alguien. He estado muy callada estos meses. Mejor, quería pensar yo. Pero contigo, todo es diferente, no solo me escuchas o me apoyas. Me haces sentir que puedo aspirar a más. Me das fuerza, le das fuerzas a este estúpido Pokemon que según tu está en continua Digievolución. Y en ese momento, pienso que no soy débil, se me olvida que estoy sufriendo a pesar de que me digas la verdad y descubra las mentiras que seguí creyendo. Crees en mi, como yo creo en ti. Y me haces sentirme orgullosa de quién soy.Debería estar destrozada, o eso es lo que mi instinto me responde. Pero estoy más idiota que nunca, siento que he perdido una familia pero... la familia no miente. No fue real. He ganado otra familia, una familia más peculiar... Grande. Me asusté de verme rodeada de tantos de ellos. Me sentí segura sabiendo que estaba compartiendo su mundo. Me sentía segura junto a él. A veces pienso en que es ridículo que tenga que pasar unas horas a su lado para recibir un chute de autoestima. Pero se va acumulando, poco a poco empiezo a apreciar que se siente orgulloso de como soy. Y hasta los detalles más tontos, de esos que me avergüenzo, es capaz de recordarmelos y hacerme sonreír.
No pienso en el tiempo. Pienso en vivirlo con él.
lunes
Madrid nunca ha sido tan eterno como hoy. He pensado que caminar por estas calles es más satisfactorio cuando lo haces con alguien que escuche tus hazañas y conozca la historia, asombrado. Tiene otro tipo de asombro, lo siente de otro modo. Y hasta unos cuantos kilómetros no lo he querido aceptar. Sonríe continuamente como si nada fuese a detenerle. Me sorprende, como nunca. Hace cosas con las que siempre soñé. Me sorprende encontrarme reacia frente a que quiera hacerme bailar cerca de la Plaza Mayor. Siempre lo había soñado. Me siento débil cuando camina abrazandome por la espalda, me tenso cuando pasa su brazo por encima de mi hombro y me abraza. No quiero que vea que soy débil a sus ojos. Y si, es verdad, me enfado por tonterías pero es que me duele pensar que ha podido imaginarse con otra. O que algún día yo no de más de mi y eso le aburra. O que tanta paranoia acaben consumiendole obligándole a ceder. Me jode por qué, hablando rápido y mal, sabe que mojo las bragas sólo con tocarme. Hasta donde hemos llegado, que ha llegado a ser...
viernes
lunes
La manera más exacta de explicar esta felicidad es que la vivierais por vuestra cuenta. Cuando estoy con él todo es perfecto. Los minutos luchando el uno contra el otro, las horas familiares, esos momentos tan especiales... Le envidio, de verdad, a veces desearía que me adoptaran para vivir a diario esta sensación. "Me mal acostumbras" le digo yo, "es para retenerte" contesta él, con su maldita sonrisa. Me siento orgullosa de mi familia, aunque a veces pierda el control. Solo que son autoritarios, lo sé, es lo que hay, no hay dos familias iguales. Podrías entenderlo y saber que no exagero si vivieras en mi piel. Pero prefiero que no lo hagas, quiero que sigas siendo mi bote salvavidas, esa droga que al colocarme me hace sentirme más alto que el Empire State. Dios... no te vayas nunca, por favor.
domingo
You want a love that consumes you...
No puedo verle igual.No a cómo lo hacía antes. No sabiendo lo que hay. Ahora, más que nunca necesito su contacto, acariciar su piel. Ahora, más que nunca, me tiemblan hasta las pestañas cuando le tengo cerca. Tanto que me entran ganas de llorar, sin saber porqué, así que aparto mi mirada, rogando que suelte mis manos y que no pueda notar su respiración. Por qué ahora siento que soy débil a sus ojos y, acabará sabiendo que puede matarme con solo rozarme. Al igual que el solo aprendió que desaparecen mis miedos al tenerle a dos centímetros de mi cuerpo para centrarme en un solo deseo: el querer beber de ese beso. Ahora más que nunca sé que quiero que se quede, para "siempre" es una palabra muy grande, pero sí hasta que nuestra felicidad se agote. Podría estar molestándole hasta el fin de mis días o estar acurrucada en su pecho hasta que deje de respirar. En eso consiste la comodidad. Cada día que pasa, aumentan los detalles y hay tantas cosas de las que querría hablar. Me quedo con que no leerá esto. De todo lo que he escrito habéis ido a mostrarle lo peor. Os lo agradezco. Por varios motivos que quedan por concretar.Y las gracias, debería dárselas a aquella persona que, a pesar de la distancia, sigue manteniendo la fe en mí. Que sabe que mis actos, a pesar de estar mal calculados, son los acertados. Y que si hablo, lo cuento, es que de verdad lo siento. Te quiero.
sábado
En tiempos de crisis
Ahora, por suerte o por desgracia, he aprendido a callar, a vivir mis sentimientos como lo que deberían ser, privados. En realidad, no hablo con nadie de lo que me está pasando, ni siquiera con él. A veces no entiendo de que va esto, ¿qué somos? ¿Dos idiotas que lo pasan bien? ¿Es esto algo serio? ¿Un juego? ¿De verdad nos queremos? Ni idea. Aunque sé que me encanta verle dormir con él miedo de que abra los ojos y me pille observándole. Me encanta peinar su pelo, no tiene sentido, pero me encanta. Lo raro es que a veces desearía cruzarle la cara, con la mano abierta, con todas mis fuerzas. Otras simplemente clavar le las pocas uñas que tengo y desgarrar le la piel. Sí, ójala. Pero todas estas palabras, estos hechos pierden el sentido por una única razón. Por que cuando me mira, y nos quedamos ambos a dos centímetros el uno del otro, todo mi mundo cambia y mis preocupaciones, las opiniones, padres, hermanos, amigos, enemigos, sueños, incluso mi respiración, desaparecen.
viernes
martes
viernes
-Siempre andas de aquí para acá, sé que buscas amor dónde quizás no lo halla. Vas a aprender de todo esto. Siempre lo haces. Pero ahora, sé que no quieres nada de nadie, ni de tus amigos, que solo quieres llorar, odiarle o soltar toda tu rabia. Lo que sea. Pero ese muro que estás creando se romperá, y pronto. ¿Sabes por qué? Porque ahora que quieres estar sola y dejar a un lado los sentimientos, vendrá un hombre que, aunque tu no quieras, te hará feliz. Espero encontrarme con buenas noticias cuando vuelva.
Y eso me hace sentirme en casa.



