jueves
Bote salvavidas
miércoles
martes
lunes
Marina
Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que escribí y releyendo los textos que hace un par de días escribí me he dado cuenta de que algo ha cambiado. Textos melancólicos, amores imposibles, sentimientos de soledad, empiezo a creer que todo eso ya no está. He conocido a la frustración en persona pero a su vez, he comprendido lo que es una buena amistad, alguien que comparte ese sentimiento pero te mira y no se rinde. Quizás me duelan las piernas de pedalear pero juro que extrañaba subir a Madrid con tanta ilusión. Normalmente me solía acompañar algún buen tema por las calles de atocha, este fin de semana me he visto pedaleando por el centro entero, echando carreras y evitando perdernos. Con ella. Y me han preguntado como soy capaz de meter en mi casa a alguien que he visto dos veces en mi vida. Sinceramente, no lo sé, pero he comprendido que quien no arriesga no gana. Y he ganado, una buena amistad, los minutos mejor invertidos de lo que llevamos de año. No es que me apasione bailar pero esta vez he aguantado. Por ella. Por que salía de mí. He ganado confianza, una nueva homie y aunque seamos unas negadas no nos vamos a rendir. Es verdad que ahora me siento un poco triste por que no sé cuando la volveré a ver, pero eso no importa, no me asusta que pasen los días y las semanas, el día que nos encontremos volverá a ser genial. Aunque echaré de menos escucharla hablar en sueños, de rampas, de miedos. Extrañaré bajar cuestas esquivando gente, como me grita que soy un peligro, las cenas rápidas, llegar hasta las tantas reventadas de montar, haciendo ruido, hablando hasta tarde, si es que era imposible callar. Son demasiadas sensaciones, historias largas en días cortos, ilusión y rabia por cuando vaya a acabar. Me quedo con los viajes en metro, colarnos en la renfe, viajar cual sintecho, pedalear hasta muy lejos, hablar casi en silencio, las risas, los abrazos, las caídas, los golpes, los nuevos amigos, los recuerdos y la sonrisa que provoca cuando leo: "Marina siempre vuelve"
miércoles
You know, I tell myself everday, That I'm going to change - that I'll be different. 'This isn't the same; I'm not the same,' that's what I tell myself... As I sit in front of the computer, praying time doesn't move. Coward, you're weak and you'll always be weak! You bloody disgrace... I pick up some new magazine, get inspired, 'I want to be like that guy,' is what I think to myself. I give it a try for two or three days - I quit. Same old shit again... Making up excuses? It's what you always do, you gutless wonder... I try to reach out with my hands, Seeking something, anything that I can find to help myself hold on... But I don't find it - I just find myself, Sinking back down into the same black swamp - I'm drowning. Awww, what's the matter? You gonna cry, you gonna cry? Yeah, I've hit rock bottom, And you know what? It feels pretty damn good down here. Nice, warm, comfortable, familiar. No pressure, no problems - just like everbody else. ...But, I don't want to be like everybody else Are you trying to catch up to me? What's the point, you're going to fail! I probably am - I know I've tasted it enough times to believe that. But still, I'm running till I can't breathe; working till my legs drop. I'm moving my body, dancing on a stage of glass and nails; It hurts and I want to quit, but somehow I don't. You think you're going to beat me - you can't, I'm the best! Yeah, you are the best, you're perfect. You're the ideal, the goal, the limit, the sky. But you're wrong about me beating you though; I know I won't. Because all I'm going to do is surpass you And I'll make sure that I just keep on climbing higher And until the day that my heart stops beating, I know, I can't quit anymore... Why? Because I've changed.
martes
Oda al optimismo
domingo
La respuesta no es la huída
viernes
jueves
miércoles
Time
martes
lunes
domingo
Dicen que no juzgar antes de tiempo es algo bueno. Que equivocarse es muy complicado en ese momento. Hay que dejarse llevar, entender de movimientos, conocer miradas, dejar actuar al tiempo. Siempre viví asustada de las personas, mirando a todos lados, como un perro inquieto. Con los años, los días, aprendi que aún existen las buenas intenciones, personas que se abren y cuentan sus miedos. Pero hay veces en que superamos las barreras y una vez mas vuelven las heridas que un día dejamos sin vida. Para abrirse y yo no estoy para fregar. Llenar de sangre mi cuerpo mutilado nunca fue un buen plan y ahora que ya está roto, no me queda más remedio que afrontarlo. Existirá el rencor que tu has provocado. Mientras tanto, tengo muchas ventanas y puertas que aún no he cerrado. Así que manos a la obra, esto está más que acabado.
sábado
Más de una vez me hubiese gustado poseer condimentos psicotropicos en mis manos, fumarmelos y poder entender esos pensamientos fugaces que atraviesan tu mente. Ingenua de mi que nunca lo sabré. Pero hoy, al verte, y ver en tu rostro el porque de todo aún así, que yo siempre pensé que el amor lo único que hace es romperse, arder y morir, en esa maldita escalera de antón martín lo vi nacer, otra vez. Y aún así quiero tu felicidad, aunque tu sonrisa no sea mía. Me esperaba algo más, sin duda, como cuando te soñé. Pero esque te idealice a ti y a todos tus momentos. Pensé mal y lo peor es que acerté. Y hoy, una vez más, abriré el chivas a falta de Daniel's y moriré, otra vez. Por malditas historias así me consumo, y se como piensas, yo también práctico el deporte de huir al no saber qué hacer. Pero es que prometiste que tu, a diferencia de otros, no lo hibas a hacer. Quién te diría que acabarás por caer. De verdad necesitaba ese empujón, han pasado casi meses desde que te vi, tan cambiado. Cosa que no volvió a suceder. Lo peor es que vienes sin respuestas y lo único que obtengo es un "no sé".















